Cuidar de la reproducción

Algunas preguntas que nos podemos para avanzar en reproducción en la acción municipal:

¿Contribuimos a poner límites a los proyectos económicos que destruyen la vida natural? ¿Promovemos los que son respetuosos con la diversidad del entorno natural?
¿Tiene en cuenta la parte reproductiva de la vida? ¿Consideras que contribuye a mantener la vida cotidiana?
¿Impacta en el bienestar de las personas más vulneradas en su día a día?

Algunas acciones que podemos poner en marcha para cuidar el reconocimiento:

¿Pensamos en los tiempos dedicados a los cuidados?

Incorporar políticas del tiempo con las que promover un reparto más equitativo del mismo.
Poner en marcha campañas y actividades de sensibilización sobre la importancia de los trabajos de cuidados para las personas y el territorio.
Diagnosticar el uso y disfrute del municipio desde una perspectiva de cuidados para que el propio espacio municipal favorezca estos trabajos. .
Planificación del municipio teniendo en cuenta las necesidades reproductivas.
Aprovechar el papel ejemplarizante del ayuntamiento para poner en valor los trabajos de cuidados (acciones de reconocimiento para el personal dedicado a este tipo de tareas, dignificación de sus condiciones laborales, etc.).
Tener en cuenta las necesidades de cuidados en la planificación de las actividades (horarios, duración, recursos, movilidad…).
Buscar fórmulas que compatibilicen la presencialidad con el teletrabajo.

¿Protegemos la vida natural frente a prácticas económicas (de la agricultura, ganadería, industria o pesca) que dañen la biodiversidad?
Limitación y regulación de caladeros de pesca, desforestación, uso intensivo para monocultivos, uso de fertilizantes químicos, herbicidas y pesticidas…
Incentivación de fórmulas basadas en el respeto a los ciclos naturales (policultivos, rotaciones…).
Incorporación de requisitos medioambientales (contratación, promoción, subvenciones) y priorización de entidades comprometidas con las personas y el medio ambiente.

¿Buscamos fórmulas que hagan más habitables nuestros territorios?
Fomento de la biodiversidad en el espacio público urbanizado (calles, plazas o parques…) y en edificios (jardines verticales, techos verdes…).
Promoción de la agricultura periurbana comunitaria (como los huertos comunitarios o escolares) que animen la autoproducción de alimentos locales por parte de la población.
Repensar el urbanismo para que responda a las necesidades de cuidados (creación de caminos escolares, parques cubiertos, plazas con espacios de encuentro…).
Reducción del espacio dedicado al vehículo privado en favor de la bicicleta y la peatonalización.

Cuidar de la reproducción

Algunas preguntas que nos podemos para avanzar en reproducción en la acción municipal:

¿Contribuimos a poner límites a los proyectos económicos que destruyen la vida natural? ¿Promovemos los que son respetuosos con la diversidad del entorno natural?

¿Tiene en cuenta la parte reproductiva de la vida? ¿Consideras que contribuye a mantener la vida cotidiana?

¿Impacta en el bienestar de las personas más vulneradas en su día a día?

Algunas acciones que podemos poner en marcha para cuidar el reconocimiento:

¿Pensamos en los tiempos dedicados a los cuidados?

Incorporar políticas del tiempo con las que promover un reparto más equitativo del mismo.

Poner en marcha campañas y actividades de sensibilización sobre la importancia de los trabajos de cuidados para las personas y el territorio.

Diagnosticar el uso y disfrute del municipio desde una perspectiva de cuidados para que el propio espacio municipal favorezca estos trabajos. .

Planificación del municipio teniendo en cuenta las necesidades reproductivas.

Aprovechar el papel ejemplarizante del ayuntamiento para poner en valor los trabajos de cuidados (acciones de reconocimiento para el personal dedicado a este tipo de tareas, dignificación de sus condiciones laborales, etc.).

Tener en cuenta las necesidades de cuidados en la planificación de las actividades (horarios, duración, recursos, movilidad…).

Buscar fórmulas que compatibilicen la presencialidad con el teletrabajo.

¿Protegemos la vida natural frente a prácticas económicas (de la agricultura, ganadería, industria o pesca) que dañen la biodiversidad?

Limitación y regulación de caladeros de pesca, desforestación, uso intensivo para monocultivos, uso de fertilizantes químicos, herbicidas y pesticidas…

Incentivación de fórmulas basadas en el respeto a los ciclos naturales (policultivos, rotaciones…).

Incorporación de requisitos medioambientales (contratación, promoción, subvenciones) y priorización de entidades comprometidas con las personas y el medio ambiente.

¿Buscamos fórmulas que hagan más habitables nuestros territorios?

Fomento de la biodiversidad en el espacio público urbanizado (calles, plazas o parques…) y en edificios (jardines verticales, techos verdes…).

Promoción de la agricultura periurbana comunitaria (como los huertos comunitarios o escolares) que animen la autoproducción de alimentos locales por parte de la población.

Repensar el urbanismo para que responda a las necesidades de cuidados (creación de caminos escolares, parques cubiertos, plazas con espacios de encuentro…).

Reducción del espacio dedicado al vehículo privado en favor de la bicicleta y la peatonalización.

Algunos indicadores para no perdernos:

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Municipios Cuidadores es un proyecto de Aradia Cooperativa